La industria del entretenimiento es una máquina imparable que está presente en nuestras vidas  24/7. Si miramos a nuestro alrededor, en cualquier momento del día, descubriremos que estamos rodeados de productos relacionados con esta industria directa o indirectamente.

En marzo del año pasado ( 2020) ocurrió lo que nadie podría haber imaginado. La sala de máquinas de la industria del entretenimiento se paró en seco. La llegada de la crisis del COVID-19 dio por sorpresa a una de las industrias menos preparadas para un problema de esta magnitud. Pero la que mejor se adaptó al proceso del nuevo cambio pandémico. Esto crea:

Sostenibilidad como motor del cambio

Pero la pandemia del COVID-19 ha destapado algo más que un modelo productivo que no resiste a una crisis sin precedentes, un problema más grave y preocupante para el resto de la humanidad: la industria del entretenimiento es letal para el medio ambiente tal y como la conocemos hoy en día.

Rodajes en remoto

Ahora se enfrenta a una nueva oportunidad.La industria se ha puesto a trabajar más, digitalizando forzosamente su proceso productivo por la alta demanda hoy en día.

Digitalización de procesos como una de las soluciones para alcanzar la sostenibilidad

Las películas y cortos de rodaje están en su momento,pues  la producciones virtuales, ya simulan algo exterior en un tiempo real .Ya que vivimos en la época adecuada,donde las películas de rodaje pueden ser hechas desde un set más local,hasta las nuevas canciones o videos del mismo.Esto a ayudado mucho al impacto ambiental de manera positiva.

Para entender lo esencial de estos conceptos en sí, hay que entender que para poder enfrentar el problema, primero hay que conocerlo,es decir hay que medir las repercusiones de las actividades.También tenemos que conocer nuestra huella que dejamos para poder compensarlo, como la reforestación ;también necesitamos medir periódicamente las emisiones de estas mismas actividades y poder trazar un plan de reducción.