1.Artículo o guía
Empieza por la información básica que tu cliente potencial necesita para entender de qué se trata tu producto o servicio, y cómo puede usarlo en la operación diaria de su negocio o para solucionar un problema personal. Este contenido educativo puede ser compartido a través de los contenidos de un blog o mediante guías y manuales en PDFs descargables.
2.Actualiza tus redes con buen contenido
Para educar a tus clientes también necesitas compartir con ellos datos sobre tu sector, como noticias de último momento, tendencias y pronósticos. Eso te ayudará a posicionar tu marca como una experta en su campo y como una fuente confiable de información.
3.Experiencias o anécdotas personales
Los consumidores optan cada vez más por las marcas humanas, aquellas que generan cercanía y empatía. La mejor manera para proyectar esa imagen es a través de anécdotas de las experiencias personales del dueño y de sus socios del negocio, de los empleados y de los clientes que se sienten satisfechos con un producto o servicio.
4.Capacitaciones
Cuando ofrecemos un producto o servicio novedoso –o cuando necesitamos posicionar nuestra marca en un contexto de alta competencia– los cursos, webinars y conferencias resultan sumamente útiles para evangelizar a nuestros clientes potenciales; e indirectamente llamar su atención ante nuestro producto.
5.Transmisiones en vivo
Por último, las transmisiones a través de plataformas de videoconferencias o redes sociales los llamados lives, son otra gran opción para generar y compartir con nuestros seguidores contenidos educativos, los cuales pueden ayudarte a promocionar tu marca o a difundir un lanzamiento o bien promocionar los beneficios del mismo.